Locura, torpeza, afán de protagonismo, alineación con tiranías y hasta trastorno emocional, son algunas de las calificaciones que diferentes actores políticos han utilizado para referirse a la decisión del presidente Gustavo Pero Urrego, de romper relaciones con el Estado de Israel.
Una de las reacciones de rechazo más llamativas, viene por parte de uno de los primeros integrantes del Gabinete Nacional, el ahora ex ministro de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Ocampo, quien no sólo rechazó el rompimiento de las relaciones sino que además resaltó la importancia de la diplomacia y el apoyo a la región por medio del envío de ayudas.
A las voces de rechazo, se sumaron la de Agustín Antonetti, director de Latin American Watch de la fundación de Libertad; María Elvira Salazar, congresista de Estados Unidos; ex presidente, Iván Duque Márquez; ex presidente, Juan Manuel Santos Calderón; ex presidente Andrés Pastrana Arango; ex ministro, Mauricio Cárdenas; nueve senadores de la República y siete representantes a la Cámara.